Colchones para personas ligeras (menos de 60 kg):
Si eres una persona ligera, es importante elegir un colchón que ofrezca una firmeza suave o media. Los colchones viscoelásticos son una excelente opción, ya que se adaptan a la forma del cuerpo y proporcionan un confort extra sin comprometer el soporte. Estos colchones ayudarán a aliviar la presión en las zonas más delicadas, como los hombros y las caderas.

Colchones para personas de peso medio (60-80 kg):
Las personas con un peso medio pueden optar por colchones con una firmeza media. Los colchones de muelles ensacados o los híbridos (con muelles y espuma viscoelástica) ofrecen el equilibrio perfecto entre soporte y comodidad. Estos colchones brindan un excelente soporte sin perder adaptabilidad.

Colchones para personas de peso superior (más de 80 kg):
Si tienes un peso superior, necesitarás un colchón más firme para garantizar el soporte adecuado. Los colchones de muelles ensacados o los de látex pueden ser una excelente opción, ya que ofrecen mayor firmeza y distribución del peso de manera uniforme. También ayudan a evitar la sobrecarga de presión en las articulaciones.